Todo empezó con aquel eslogan buen rollista y conciliador de "Esto lo arreglamos entre todos". Así nos fuimos convenciendo de que verdaderamente debíamos dar nuestro brazo a torcer y sentir nuestra parte de responsabilidad en aquella crisis, desaceleración del crecimiento o como quisieran llamarle (sobre este término hay estudios diacrónicos de su evolución semántica). Bien, esto a continuado... Y llegó la modernidad y el eslogan fue entonces "debemos hacer reformas estructurales" y las hicieron, se abarató el despido, aumentó aún más el desempleo, se hizo precaria, o más precaria la contratación, y la orgía de contratos temporales y demás lo contaminó todo.
Y ahora dices voy a buscar empleo, para arreglarlo entre todos. Ya debe ser fácil se han llevado a cabo todas esas reformas estructurales necesarias.
Y por doquier y por donde mires lees... "¡Está es tu oportunidad! Si eres bueno puede incluso que consigas un contrato temporal, aunque sería conveniente que previamente te hayas hecho autónomo (por eso de ahorrar) No andamos con mucha pasta... ¿Quieres contrato? Pues ya sabes te toca pagarte tu propia seguridad social y tus bajas por enfermedad."
"Colaborador externo" "Contrato por obras o servicios". Todo es lo mismo. Y llegan los becarios y los rebecarios...y los cursos de formación que se parecen bastante a un empleo por el que tú pagas.
Y entonces lo veo claro. Es la Neolengua otra vez haciendo estragos en aquellos que se niegan a aprenderla. Antes en la otra lengua, en la vieja, teníamos una palabra "esclavitud" ahora tenemos más: "Colaborador externo", "Contrato por obras o servicios", "Prácticas no remuneradas"...
Este lenguaje del futuro no deja de sorprenderme.
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