Cada cierto tiempo nos llega una nueva entrega del exitoso tranquilizador de conciencias "salvemos a los niños pobres del mundo"... Lamentablemente no es cierto que se pretenda salvar a nadie. La caridad, la limosna, nunca fue remedio y además sólo conduce a la indignidad y la humillación.
Actualmente la situación del continente africano es insostenible y la pretensión de estas campañas no es dar solución a sus problemas sino hacer sostenible la carencia. Es necesaria la carencia sostenible para mantener los beneficios que de ella se derivan.
El proceso descolonizador de África llevado a cabo fundamentalmente tras la segunda guerra mundial sirvió única y exclusivamente a una estrategia por parte de los antiguos colonizadores. No se respetaron fronteras naturales anteriores a la colonización y se les hizo mantener una deuda por siempre con sus antiguos dueños. Con los años, desde las antiguas colonias se apoyaron dictaduras crueles, se alimentaron guerras y se aprovechó la situación de caos para mantener un expolio que llevaba años cometiéndose.
Actualmente organizaciones internacionales como el FMI ayudan a mantener la situación de carencia con mecanismos como la "deuda externa", un matrimonio forzado a gananciales con sus antiguos colonos. África sólo nos sale rentable si permanece dependiente. El apoyo económico que nos piden sólo sirve para poder mantener la situación no para solucionarla.
Los cables de Wikileaks nos advertían de la máxima preocupación de EE.UU respecto al continente, que no era más que la necesidad de proteger minas de cobalto, bauxita, cromita o coltán que allí se encuentran para mantener el desarrollo tecnológico del país americano. Sin olvidar las grandes reservas de materias primas tan fundamentales como petróleo, gas natural o carbón que allí se encuentran. A su vez, la repentina preocupación por Somalia nos puede hacer recordar a esos malvados piratas de gran protagonismo en prensa hace no tanto tiempo, y recordar los tratados internacionales con respecto a pesca y el porqué de los barcos españoles en aguas somalíes...
África, a su vez, es el continente con más conflictos bélicos del planeta, siendo curioso el dato de que importa casi el 99% de su armamento, principalmente armas ligeras. EE.UU, Rusia y Alemania encabezan la lista junto con otros países como España, Israel o Francia...que se consolidan como los principales exportadores de armas ligeras durante el periodo de 2001/2010 siendo el tráfico de armas el negocio más rentable del mundo. Cabe destacar que no hay pretensión política en dicho negocio ya que el fin económico lleva a apoyar armamentísticamente a grupos opuestos de forma sistemática.
Por si fuera poco, también debemos hablar de la deslocalización productiva y sus efectos en economías devastadas, como es el caso de la mayor parte de África, envuelta en una falsa descolonización y en una guerra continua muy rentable. Las grandes multinacionales se sirven de la situación de descontrol no sólo para obtener materiales sino también para aprovecharse de una mano de obra barata y sin exigencias de derechos laborales. Esto empobrece a la población, impidiendo el desarrollo. Cuando el nivel de pobreza llega a sus cotas más bajas se lanzan estas campañas que a su vez sirven a sus patrocinadores para obtener importantes ventajas fiscales en sus países de origen. Con todo ello la "carencia sostenible" acaba convirtiéndose en un negocio redondo.
1 comentario:
También podría llamarse la pobreza impuesta. Es un artículo muy comprometido y arriesgado, buen trabajo.
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