martes, 19 de enero de 2016

¿Escondió el capitalismo al padre de la criatura?


Fotograma de la película Una Nueva Amiga.
Yo como feminista cuando reivindico la actuación de Bescansa no reivindico la imagen de la madre, en todo caso la de la madre trabajadora, es decir reivindico que existe una economía de cuidados paralela y al margen de la visible economía productiva y me parece necesario que se ponga de manifiesto. No creo necesario reivindicar a la madre porque aunque sea en lo privado ya ha sido reivindicada y no lo veo necesario. Una mujer cuando decide ser madre (no olvidemos que es una responsabilidad y no un derecho y por tanto es vital que sea una decisión tomada con mucho cuidado y nunca jamás una obligación ni una decisión tomada por otros) es consciente de lo que ello conlleva. 

Sin embargo no es tan común que exista esa percepción de responsabilidad en el caso de los padres (no digo con esto que no haya padres excelentes y mejores que muchas madres) pero que la sociedad aún no ha marcado la responsabilidad de estos cuando se toma la decisión de traer a una criatura al mundo ya que los cuidados siguen vinculados a lo privado y a la mujer. La mujer sin salir de lo privado ha conseguido introducirse  en el mercado laboral, es decir, en la economía productiva y asalariada, tradicionalmente sector de los hombres. Y por tanto la distinción o separación entre ambos campos ha seguido vigente. Con todo ello a la responsabilidad exclusiva de los cuidados se le ha sumado la responsabilidad en el mundo laboral, y todo esto sin hacer visible y empoderar lo primero. 

A los padres sin embargo, sólo tras un divorcio se le plantean sus responsabilidades, habitualmente relacionadas con el pago de una pensión, es decir, su rol tradicional de aportar dinero obtenido por el trabajo en la esfera pública para el mantenimiento de la esfera privada. En el caso de las polémicas "custodias compartidas" (que se otorgan con más frecuencia de lo que se dice) es curioso la exigencia de compartir custodia sólo tras el divorcio cuando en realidad la custodia debe ser compartida desde el nacimiento y ahí no suele haber mucha polémica ni mucha exigencia por parte de la sociedad.

 Yo no pido que la mujer deje su vinculación con la red de cuidados, sino incorporar al hombre en ese sector que aún no se manifiesta como transversal a ambos sexos, y con ello abarcar a la sociedad en su conjunto como sujetos activos dentro de la economía de cuidados. Hacer de la economía de cuidados un asunto de estado, porque al fin y al cabo ya es un asunto político por mucho que muchos quieran que permanezca escondido. 

Finalmente con esto lo que se exige es que tanto la economía productiva como la reproductiva y de cuidados queden visibles y se eliminen las parcelas distintivas que el machismo generó creando dos mundos uno visible y masculino y otro invisible y femenino. 

 El ejemplo de la crianza es sólo un punto de toda esta red de cuidados, muchos han hecho burlas diciendo que si se quiere poner de manifiesto dicha estructura podrían haber llevado a algún anciano o a algún enfermo. Efectivamente no sólo se trata de la crianza de los niños si no que va más allá. Pero también nos cuidamos entre nosotros sin estar enfermos, sin ser ancianos o sin ser niños. La red de cuidados es más amplia y es uno de los sustentos vitales para el mantenimiento de cualquier sistema económico productivo. 


Otra duda y generador de controversia ha sido la gran pregunta de ¿dónde está el padre de la criatura? Desde el feminismo tradicional se ha hecho hincapié en la necesidad del reparto de funciones dentro del hogar y aún así todavía escuchamos eso de "los hombres no ayudan en casa"... cómo si tuviesen que "ayudar" a alguien... Y sí, el padre, el hermano, el hijo, en general el hombre no aparece como elemento crítico y reivindicativo dentro de estas luchas, al menos de forma visible. Como decía anteriormente si bien la mujer ha entrado (con dificultades y ocultamientos) en la esfera pública, el acceso del hombre a la esfera privada no está exento de problemas. El machismo siempre deja clara en su férrea estructura que lugar ocupa cada uno y sigue alimentando que salir de ese lugar natural es poco menos que travestismo. El machismo es muy "ordenado" y por eso mismo tampoco admite que ni siquiera es necesario que exista un "padre de la criatura", que a veces lo que hay son dos padres, a veces una madre sola, a veces dos madres... Que las estructuras familiares actuales ni siquiera se someten a ese orden. 


Llegados a este punto entenderemos porqué el machismo ha sido un gran aliado, una vez más, para el sistema actual capitalista y viceversa. Manteniendo toda la economía reproductiva y los cuidados en la sombra, quitándole importancia o dejándolo como asuntos de índole privado, el sistema capitalista se ahorra mucho dinero y suma otro pilar que le sustente. ¿ O creéis que un sistema tan imperfecto como este y que genera tanta desigualdad sería sostenible si no tuviese a mucha gente cuidando de otra gente? Pero había que desviar esa atención. Primero hacia lo privado y con organización, es decir, repartiendo funciones por sexos y encerrándolas en el hogar. Después cuando el sexo oculto quiso tener valor dentro de las sociedades y con este sistema supone por tanto entrar en el mercado productivo y recibir dinero a cambio de tu trabajo (lo que se conoce como un empleo), es decir, cuando las mujeres entraron en el mercado laboral sólo se les permitió con una condición que era seguir manteniendo las distinciones, seguir manteniendo oculto que este sistema sólo se puede sostener gracias a redes de cuidados. Esas mismas redes que hacen que no haya una situación de alarma social pese a recortes en educación, en sanidad, en dependencia… Lo que antes hacia el estado ahora lo tiene que hacer alguien, no ha dejado de ser necesario. Y el estado sabía que había quién se iba a encargar. 

Durante muchos años las mujeres que quisieron salir de la oscuridad del mundo privado han tenido que ocultar que en realidad tenían una doble vida, sacrificando por el camino tiempo y vivencias tanto en un terreno como en el otro. Hoy muchas mujeres se levantan contra esto porque consideran que no es necesario, que con un reparto lógico de funciones y unos empleos racionales se puede disfrutar de todo, ya que siempre han tenido todo. 

No hay padre de la criatura porque al sistema no le conviene que la mitad de su población descubra que toda esta red también es responsabilidad suya porque... ¿ cómo puedes explicar a una sociedad en su conjunto que se exigen horarios flexibles, disponibilidad 24 horas, facilidad de desplazamiento cuando nos demos cuenta de que todos y todas tenemos "cargas" familiares y personales?

Definitivamente dejemos de cuestionar nuestras funciones en la vida no vaya a ser que al final, una vez más, lo que quede en entredicho sea el propio sistema capitalista y sus variantes de opresión. 

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